Siempre quise - desde antes de tenerlos - que los diseños de mis tatuajes reflejaran momentos, personas o frases que fueran muy significativas para mí. Como amo incansablemente a mi familia, no es casualidad que los primeros tuvieran conexión con mis seres queridos.
Mi abuelo materno moldeó mucho de lo que soy ahora: era sumamente creativo y hábil para proyectos manuales, le gustaba la actuación, era siempre el más divertido de la fiesta, amaba a los animales y tenía siempre buen humor, aunque no estuviera del todo bien. Cuando nos dejó sufrí mucho su ausencia, pero su amor y enseñanzas me siguen acompañando hasta hoy.
Hace un mes decidí “rayarme” en honor a mi abuelito. Él hacía máscaras tradicionales costarricenses con barro y papel, máscaras que me dejé conmigo como herencia cuando falleció. Y como era tan divertido y bromista decidí dibujarme el “Diablito”, una máscara típica y muy popular entre los personajes de las mascaradas ticas. Quería también dibujarme flores, porque aunque él no nos acompaña más lo físico, su ejemplo está vivo para mí.
Así fue como el tatuador y yo llegamos al diseño que llevo ahora en mi antebrazo. Con sus recomendaciones y los productos naturales que usé he sanado súper rápido y sin molestias.
Y como era tan divertido y bromista decidí dibujarme el “Diablito”, una máscara típica y muy popular entre los personajes de las mascaradas ticas.
Las recomendaciones generales que me dieron en el estudio (y que seguí al pie de la letra) fueron:
Como yo convivo con tres gatitos y ellos duermen en mi cama, me pidieron que me dejara toda la noche el plástico con el que se cubre el tatuaje recién hecho. Para evitar posibles reacciones al pelito de los gatos, decidí dormir con una blusa de manga larga durante la primera semana.
Se recomienda no exponerse al sol directo por, al menos, 15 días.
En caso de picazón, no rascarse.
No meterse a piscinas ni al mar por, al menos, 15 días.
Aparte de cumplir con los pasos anteriores, decidí que iba a aplicarme solo productos naturales u orgánicos para el proceso de curación. Este artículo no está patrocinado por ninguno de los productos que usé durante el proceso, pero te los comparto porque a mí me funcionaron:
Para refrescar la piel, bajar la inflamación y aliviar la sensación de comezón usé gel de sábila de Bioland. Lo mantengo en la refri para que esté siempre frío.
Para mantener la piel hidratada usé una pomada casera elaborada con aceite de coco, manteca de cacao y gotitas de lavanda; además usé el gel de semilla de uva de Cervilla Natural.
Pasados los quince días, cuando usaba blusas de manga corta me ponía bloqueador solar de Bioland y aceite de semilla de uva.
Esos son los productos naturales que usé religiosamente por las dos primeras semanas, y ahora lo limito a crema corporal natural y bloqueador cuando no uso blusa de manga larga.
¿Vos tenés tatuajes? ¿Qué productos usaste para que sanara? ¡Contame en los comentarios!
Con cariño,
Silvia.
