El aislamiento social que nos ha mantenido en casa a muchas personas nos ha obligado a repensar y evaluar muchas cosas. En mi caso, aunque he sentido miedo o ansiedad, he decidido volcarme hacia las enseñanzas que esta cuarentena me está dejando.
Hoy te quiero compartir las seis lecciones que me ha dejado el aislamiento social.
Hay un podcast en el que te hablo de este tema. Podés visitar la pestaña PODCAST para escuchar este y otros programas.
Antes de contarte lo que aprendí, quiero aclarar que no pretendo subestimar los sentimientos de quienes en este momento sienten miedo y tristeza y son incapaces de reconocer el aprendizaje que hay detrás de esta situación. Detrás de toda experiencia negativa hay una lección que necesitamos aprender, pero a veces no nos damos cuenta en ese momento, sino hasta tiempo después.
1. No posponer encuentros
¿A cuántas personas les dijiste “pongámonos de acuerdo luego para tomarnos un café” y luego se te vino encima esto de la pandemia y ya no pudiste verlas? A mí me pasó. De ahora en adelante pondré mucha más energía en pasar tiempo de calidad con las personas que estimo y procuraré ver a mis seres queridos cuando pueda.
2. Tomar una pausa
Honestamente, yo no sabía cuánto necesitaba una pausa… hasta que tuve que recluirme en la casa. En mi caso, que soy una persona metida en mil cosas y con proyectos e ideas rondándome siempre, este respiro del aislamiento me ha tomado por sorpresa, pero lo bendigo y lo agradezco porque me ha obligado a conectarme de nuevo conmigo misma y me ha forzado a bajarle al estrés y al corre corre de siempre. Después de esta cuarentena estoy segura de que buscaré crearme momentos de aislamiento para volver a concentrarme en semi propio bienestar.
3. Repensar las necesidades
No te miento cuando te digo que he estado usando una cuarta parte de mi ropa. Eso me deja pensando en si realmente necesito todo lo que tengo en el clóset, en la cocina, en el librero… Creo verdaderamente que es un buen momento para deshacernos de las cosas que no necesitamos y que nos roban paz. Y me refiero a todo: cosas materiales, actividades que ya no queremos hacer…
4. Repensar las relaciones
Volviendo al punto anterior, es un buen momento para sacar de nuestra vida lo que no nos aporta nada, eso incluye relaciones y vínculos con personas tóxicas. Al mantenernos lejos de las personas que nos hacen daño podemos sentir si verdaderamente nos roban paz y si debemos mantener contacto con ellas.
5. Solidarizarse y vivir en comunidad
Hay quienes están recibiendo el mismo ingreso que antes, o más, durante esta cuarentena, pero hay quienes la están pasando mal y necesitan de nuestro apoyo. En lugar de convertir nuestro supermercado local en un desierto, llevándonos todo del estante, es mejor dejar para los demás y comprar lo necesario. Ahora se necesita de mucha solidaridad y es un momento genial para ponerlo en práctica con los demás.
6. Recibir y aceptar
Si vos tenías un viaje planeado, o vacaciones… sabrás a qué me refiero. Hay una gran parte de la vida que no podemos controlar, por eso es que ante situaciones como estas solo nos queda aceptar lo que viene y seguir adelante. Se trata de recibir lo que la vida nos está dando e incorporarlo si es necesario, sin juzgarlo. No podemos viajar a Japón si los aeropuertos están cerrados, de la misma manera en que no podemos controlar la muerte de un ser querido… solo podemos aceptar lo que pasa e incorporarlo sin revolcarnos en el dolor o la molestia.
¿Qué lecciones te ha dejado la cuarentena a vos?
Con amor,
Silvia.
